HERMOSILLO, Sonora.- La revisión de la autoridad en los operativos de control de alcoholimetría de la Policía de Hermosillo deberá partir del consentimiento de las personas conductoras, de forma voluntaria y sin ningún tipo de coacción, destacó el comunicado de prensa de la Comisión Estatal de Derechos Humanos.
Esto debido a la polémica que se ha generado por la instalación de estos puntos de revisión antialcohol implementados por la Policía Municipal, pues algunos sectores de la sociedad no están de acuerdo con ellos y señalan que no están supervisados.
Si el agente de la Policía Municipal precisa determinar si una persona se encuentra bajo los influjos del alcohol, solamente puede solicitarle información breve y hacer una revisión ocular superficial”, concretó el presidente de este organismo, Luis Fernando Rentería Barragán.
Si en su caso se determina que existen indicios claros y objetivos de la ingesta de alcohol de la persona que conduce el vehículo, los elementos de la Policía deberán informar de la necesidad de que se practique una prueba de alcoholimetría, la cual no puede ser en ningún momento obligatoria.
Para la Comisión, señala, la seguridad vial no debe ser un motivo para la afectación de ningún tipo de derechos de las personas.
Las medidas de carácter preventivo para proteger la vida y garantizar el orden público, en todo momento, deben tener como prerrequisito la actuación de la autoridad apegada a las normas constitucionales y legales que nos rigen, refiere el boletín de prensa.
El organismo defensor de los derechos humanos anunció ayer que estará presente en los filtros antialcohol que implemente a partir de hoy la Policía Municipal en la capital del Estado.
Fuente: Redacción/GH
