Opinión

Protección Civil, otra vez el patito feo

LO QUE SE HA publicado en medios sobre la nueva Ley de Competitividad y Desarrollo Económico para el Estado de Sonora recién aprobada este miércoles me lleva a pensar que de nueva cuenta se olvidaron de incluir un capítulo

en el que se le otorgue un fuerte respaldo a la protección civil tanto estatal como municipal.

Manejan un algo relacionado con las visitas de verificación, pero eso es correctivo, no preventivo.
Cualquier empresa que se venga a instalar a Sonora sea de fuera o de dentro del Estado requiere hasta el momento de siete diferentes permisos para instalarse lo que hace que su inauguración empiece casi seis meses después –mínimo--, desde que empiezan en el paso uno.
Por supuesto que ese hecho burocrático viene a ser una de las constantes que dio origen a esos cambios legales. Es cierto.
Sin embargo, hay un error técnico que los diputados no vieron. Al menos es lo que indican con su nueva ley.
Creen que con la aprobación de un DRO (Director Responsable de Obra) en la construcción del edificio con eso se llena el requisito de Protección Civil, pero no, debe haber especialistas en manejo de gas, energía eléctrica y todos aquellos procesos que requieren de supervisión externa. Incluso, en planos antes que durante la construcción de la obra.
Si usted va a cualquier CIDUE municipal encontrará por fuera a ingenieros que son DRO y le firman cualquier plano por una cantidad de dinero. Ocurrió que la facultad de nombrar Directores Responsables de Obra se las quitaron a los ayuntamientos que sometían a pruebas de deveras a todos los aspirantes y se la otorgaron a los colegios, sobre todo de ingenieros (que les entregan a cualquiera esa facultad) a cuyo edificio en el caso de Hermosillo y por cierto, se les cayó la barda para pena ajena.
Son DRO hechizos. Piratas. ¿Qué no tienen nada que ver con la ley en mención?, claro que sí. En la ciudad de México surgió un DRO así que están por meterlo a la cárcel al caerse un edificio que él dio el visto bueno para su construcción.
En Sonora también hay DRO falsos, ojo con esto. Es un tema en el cual se debe abundar pues es necesario si queremos contar con empresas seguras. Y es que una vida no tiene costo.
Ser DRO no es una calificación fácil o no debería de ser, tan es así que en el Código Penal de Sonora –artículo 65 tercer párrafo—se establece que en caso de un siniestro en un inmueble y ocurran dos o más muertes, el DRO irá a la cárcel de inmediato y desde allí procederá a su defensa.
Por eso es peligroso el estampado de una firma, aunque los DRO piratas digan que no pasa nada.
¿Cuántas explosiones hemos escuchado de negocios que manejan gas para la preparación de su negocio, sobre todo pizzerías?
Para que se de una idea de lo que hablamos. En el caso de Hermosillo, durante el año 2016 en cuanto a servicios generales (incendios, cortos circuitos, fugas de gas y otros) se atendieron casi diez mil casos, 520 de los cuales ocurrieron en comercios, 59 en industrias, 33 en almacenes, sumando en total casi cien millones de pesos en pérdidas.
Pudiéramos asegurar que las grandes empresas –máquilas, tiendas departamentales, industriales, etcétera--, cuentan por ejemplo con sistemas adecuados contra incendios o cualquier otra eventualidad, ¿recuerda las pasadas lluvias y las inundaciones de negocios como Walmart?, gracias a Dios el agua no llegó a la generación de energía eléctrica –un enchufe--, por eso bajaron los interruptores y se oscurecieron.
¿O creyó que se había ido la luz siendo que cuentan con plantas enormes para que no se les pierda su producto en caso de un apagón?
¿Y los planos?, ¿Y el DRO?, ¿Y la aprobación de todos los filtros –creo que son siete--, por los que deben de pasar para empezar a laborar?
Ese tipo de detalles deben de estar regidos por la ley y que entiendan los inversionistas que no se trata nada más de venir e instalarse al menor costo posible –y ahorrarse unos pesos en la prevención de sus empleados y clientes--, sino que si van a venir que sea con todas las de la ley y parejos todos, que no empiecen con corruptelas muy propias de quienes piensan en invertir poco y ganar mucho como lo hacen la mayoría de los empresarios de dentro y de fuera.
Está claro que en esa nueva ley además manejan las cuestiones de verificaciones, pero ¿sabe usted lector cuántos inspectores tienen las áreas estatal y municipal (en el caso de Hermosillo), para realizar las visitas adecuadas?... En la estatal –así como se oye, para todo el Estado--, creo que ya subieron a ocho o a diez y en la municipal no pasan de seis u ocho. A lo mejor me equivoco en números, pero son muy pocos.
¿En algún apartado de la nueva ley de promoción económica viene el apoyo serio a estas dependencias tan necesarias y relevantes para mejorar nuestra economía?, apuesto a qué no.
Y en Protección Civil siempre ha sido así desde hace años. Son el patito feo de la Secretaría de Economía y del resto de las secretarías pero que a la hora de los cocolazos, al enfrentar una situación de emergencia, deben agachar la cabeza y acudir a ellos.
Lo bueno es que se acaba de abrir un semestre en la escuela de ingeniería de la Unison en materia de protección civil. Es un gran paso.
Corresponde ahora a los diputados entender y darle la importancia debida a esa área que batalla horrores para más o menos tapar el ojo al macho. Ojalá llamaran a los titulares a rendir cuentas –como lo hacen con los secretarios--, y a conocer lo que es Protección Civil para comprender no solamente su importancia, sino su necesidad y en el próximo presupuesto lo respaldaran con la seriedad que merece pues no es un tema que nada más sale a relucir en los momentos de terremotos y luego desaparece como está ocurriendo en estos momentos en la CDMX.
En fin, por hoy es todo, mañana le seguimos si Dios quiere. Hay que visitar a nuestros muertitos.
Armando Vásquez Alegría es periodista con más de 30 años de experiencia en medios escritos y de Internet, cuenta con posgrado en Administración Pública y Privada.
Correo electrónico: archivoconfidencial@hotmail.com
Twitter: @Archivoconfiden

Armando Vásquez Alegría

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