Opinión

¿Será percepción?

Del 22 al 25 de noviembre será el XXIX Simposio de Historia que organiza la Sociedad Sonorense de Historia, el tema es La historia de los medios de comunicación en Sonora.

El punto es que hasta el día de hoy, no veo ningún poster alusivo, ni conozco el programa, ni los posibles ponentes y sus historias. Sería interesante e importante que el actual presidente de dicha organización, que además es comunicólogo, diera a conocer lo antes mencionado, digo, para poder difundir en los medios de comunicación el ya tradicional simposio ¿Paradójico verdad?

El tema es interesante e importante, repito, ya que en este momento los adelantos tecnológicos permiten que todos los individuos participen en el constante manejo de “la información”; y como consecuencia, la libertad de expresión adquiere un valor que rebasa las leyes (jurídicas) y morales (éticas). Al menos en teoría.

La sociedad sufre, hoy, un proceso de descomposición, un serio problema donde todos estamos involucrados consiente e inconscientemente; donde todo se politiza buscando siempre el bien particular y material.

Por ejemplo, la seguridad crece exponencialmente ante los ojos de los que, se supone, salvaguardan la tranquilidad y paz social de nuestro entorno, mismo que se ve amenazado en los seres más vulnerables como lo son los niños y adolescentes.

Ante esto, los funcionarios-políticos, minimizan los hechos, y solo hacen referencias a los efectos pero no a las causas. Y, el resultado mediático de “sus programas” de prevención, solo duran el tiempo de su gestión, con la salvedad que dichos “programas” se diluyen en ese corto tiempo por falta de seguimiento y de su misma aplicación. Todo queda en “buenas intenciones” (¿?)

Lo he dicho de tiempo atrás, años, que los medios, principalmente la radio y televisión, son factores que promueven la apología del crimen, de ese que han dado en llamar organizado. Y mire usted que Santo no soy.

Usted lo vive en su casa, en la calle, lo mismo hombres que mujeres adolescentes y menores utilizando un lenguaje soez, expresiones que reflejan carencia total de valores; recuerda usted a Cri-Cri, es pregunta sin interrogación, quizá sí; pero ellos y ellas hoy solo recuerdan el corrido de tal narcotraficante porque lo escuchan en los programas creados y apoyados por los concesionarios y líderes sindicales de la radio y televisión. Ah! Y los profesionistas egresados de las universidades donde estudiaron ciencias de la comunicación, solo sirven al patrón.

Claro, hay que reconocer los esfuerzos que hacen algunos políticos que de pronto dicen: "La verdad da mucha pena ver de repente en los municipios a las mismas autoridades o funcionarios promocionando ese tipo de corridos y lo viví y hay personas que me lo han comentado también. La decisión de poder trabajar en esa iniciativa fue para poder mandar a los municipios una iniciativa de ley donde se programen muy bien en la Ley de Administración Municipal y que cuando expidan sus permisos lleven las leyenda de que se prohíbe contundentemente el emitir ese tipo de corridos en espectáculos, festivales y eventos". El diputado José Lorenzo Villegas, en torno a una propuesta que presentó el Partido Nueva Alianza para prohibir los narcocorridos en las estaciones de radio, eventos públicos y fiestas populares.

Lo mismo el senador Zoé Robledo Aburto y la diputada Lía Limón García, solicitaron a la Secretaría de Gobernación y al Instituto Federal de Telecomunicaciones no ser omisos con las televisoras comerciales que transmiten programas conocidos como “narcoseries” al considerar que hacen apología de la violencia.

Para las autoridades federales, la iniciativa de Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión, reformada, dicen que “impulsará la sana competencia, abatirá la exclusión social y atraerá inversiones para lograr una mayor cobertura de servicios”, y con ello controlar que los medios electrónicos difundan espacios “educativos, culturales y cívicos” además de “…revisaría noticieros del país con el fin de que den información imparcial, objetiva, oportuna y veraz del acontecer nacional e internacional”.

Pero resulta que la Ley Federal de Radio y Televisión, publicada en el Diario Oficial de la Federación el 19 de enero de 1960 y reformada en el 2012, en su artículo 63 establece la prohibición de transmisiones “…que causen la corrupción del lenguaje y las contrarias a las buenas costumbres, ya sea mediante expresiones maliciosas, palabras o imágenes procaces, frases y escenas de doble sentido, apología de la violencia o del crimen".

Parafraseando a connotado periodista diferente y radiofónico: “ante qué estamos”, porque hoy, entre reformas legales, libertinaje y demás, la libertad de expresión se encuentra en riesgo debido a que “un proyecto de sentencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación —que será analizado la próxima semana— plantea modificar el derecho de réplica...El dictamen elaborado por el ministro Alberto Pérez Dayán plantea modificar la ley para eliminar los términos “inexacta o falsa”, y ahora cualquier persona que se sienta agraviada por la información que haya sido difundida en medios de comunicación podrá ejercer el derecho de réplica, e incluso iniciar un proceso judicial, sin importar si se trata de datos verídicos”. El Universal: 2016-10-31.

Pero bueno, parafraseando a la nueva generación de políticos que hoy ocupan el lugar “es solo percepción, la realidad es totalmente distinta según los datos que nosotros tenemos”.

El punto es que los interesados en la historia, quieren saber quiénes contaran la historia de los medios de comunicación en Sonora este 22, 23, 24 y 25 de noviembre en la Casa Uruchurto, sede de la Sociedad Sonorense de Historia. Lugar al que le robaron la placa de bronce.

Pero mejor a’i se las dejo. Dice Carlos Moncada Ochoa en su columna que publica en el #PortaldelaGente “la tesis del periodista Armando Vázquez Alegría, que comenta José Felipe Medina, en el sentido de que tal vez no se encuentra, detrás de la reciente ola de robos, el crimen organizado, ni siquiera bandas ordinarias de ladrones, sino que es organizada con el fin de deteriorar la imagen del gobierno municipal priista, es lógica y posible”. Esa es su percepción…!!!SARAVAH!!!

mtesota@gmail.com
@mariomunguia8



















El Universal
Dia de publicación: 2016-10-31

La falta de libertad de expresión o imponerle excesivas limitaciones es siempre reflejo de sistemas autoritarios que no permiten el escrutinio o la crítica a sus acciones. En nuestra región —América Latina— es un derecho que con frecuencia se encuentra en la mira de grupos en el poder con el fin de coartarlo.

En México, la libertad de expresión se encuentra actualmente en riesgo debido a que un proyecto de sentencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación —que será analizado la próxima semana— plantea modificar el derecho de réplica. La normatividad actual determina que toda persona podrá ejercer ese derecho ante aquella información “inexacta o falsa” y que le cause un agravio. El dictamen elaborado por el ministro Alberto Pérez Dayán plantea modificar la ley para eliminar los términos “inexacta o falsa”, y ahora cualquier persona que se sienta agraviada por la información que haya sido difundida en medios de comunicación podrá ejercer el derecho de réplica, e incluso iniciar un proceso judicial, sin importar si se trata de datos verídicos.